una historia... un juego, el de las colmenas... una canción de abejas... su zumbido... un dibujo muy dulce...
Gracias a esos bravos caballeros que liberaron a sus princesas de colores de las fauces del temible dragón de dos cabezas, en su castillo de miel... Gracias a Álvaro, Alejandra, Jimena, Pablo, Manuel, Marina, Blanca...